19 enero 2023

Hay voces libres...

 

Hay voces libres,
y voces con cadenas
y hay piedra y leño y despejada llama que consume;
hombres que sangran contra un sueño
y témpanos que se derrumban sobre las calles sin gemido.
Hay límites en lo que no se mueve entre las manos
y en lo que corre corre y huye como una herida;
en la arena intangible cuando el sol adormece
y en esa inconfundible precisión de los astros.
Hay límites en la conversación tranquila que no pretende
y en el vientre estancado que se levanta o gira como una peonza.
Hay límites en ese líquido que se derrama intermitentemente
    mientras los ojos de los niños preguntan y preguntan a una
    voz que no llaman;
hay límites
en la amistad
y en esas flores enamoradas que no se escuchan.

Hay límites
y hay cuerpos.
Hay voces libres
y voces con cadenas.
Hay barcos que cruzan lentos sobre los lentos mares
y hay barcos que se hunden medio podridos en el cieno profundo.
Hay manteles tendidos a la luz de la luna
y cuerpos que tiritan sin sombra bajo la oscuridad de la miseria.

Hay sangre:
sangre que duerme y no descansa
y sangre que baila y grita al compás de la Muerte;
sangre que se escapa de las manos cantando
y sangre que se pudre estancada en sus cuévanos.
Hay sangre que inútilmente empaña los cristales
y sangre que pregunta y camina y camina;
sangre que enloquecida se dispara
y sangre que se ordena gota a gota para nunca entregarse.
Hay sangre en lo que no se dice
y sangre que no se calla y no se calla.
Hay sangre que rezuma medio seca bajo las telas sucias
y sangre floja bajo las venas que se para y no sale.

Hay voces libres
y voces con cadenas
y hay palabras que se funden al chocar contra el aire
y corazones que golpean en la pared como una llama.

Hay límites
y hay cuerpos
y hay sangre que vive separada bajo las duras cruces de unos hierros
y hay sangre que pasea dulcemente bajo la sombra de los árboles.

Hay hombres que descansan sin dolor contra el sueño
y témpanos que se derrumban sobre las piedras sin un gemido.


Comparto hoy este poema de Emilio Prados (1899-1962), poeta malagueño perteneciente a la Generación del 27, Premio Nacional de Poesía en 1938. Con Manuel Altolaguirre fundó la imprenta Sur en Málaga en 1925. A Prados y Altolaguirre también le debemos la edición de la mítica revista "Litoral", considerada de vital importancia para el desarrollo de los miembros de la Generación de la Generación del 27.

El poema seleccionado nos propone una reflexión sobre la necesidad, o no, de la existencia de límites, posibilitando así la unión de contrarios. Es un poema de esencia surrealista en cuanto a la libertad expresiva y formal (ausencia de rima, versos largos, imágenes oníricas...), pero en su conjunto el mensaje creo que resulta bastante claro. Solo hay que detenerse en estos versos que se repiten a lo largo del poema: " Hay voces libres / y voces con cadenas". 

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